Las mujeres son más susceptibles que los varones al daño orgánico
producido por el alcohol debido a los distintos patrones de consumo, de
composición corporal, diferencias metabólicas y farmacocinéticas, según
expertos en Medicina Interna.
Por ejemplo, en patología cardíaca, a dosis bajas de alcohol, las
mujeres tienen un menor efecto beneficioso en la cardiopatía isquémica.
En consumos excesivos de alcohol las mujeres presentan un mayor grado
de disfunción ventricular dependiente de la dosis, con más riesgo de
fracaso ventricular.
También, en la patología hepática por consumo de alcohol, las
mujeres presentan una mayor propensión a desarrollar hepatitis
alcohólica, fibrosis y cirrosis hepática con menores dosis acumuladas
que los varones. Y el deterioro cognitivo y la atrofia cortical por
alcohol es más frecuente en mujeres a igual consumo que los varones.
Así lo indicaron hoy el jefe del Servicio de Medicina Interna II del
Hospital Universitario de Salamanca y coordinador del Grupo de Trabajo
sobre Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna
(SEMI), Francisco Javier Laso, y el presidente electo de la Federación
Europea de Medicina Interna, Ramón Pujol.
Los facultativos participaron en la I Jornada sobre Alcohol y
Alcoholismo, organizada por el Grupo de Trabajo de la Sociedad Española
de Medicina Interna en la Hospedería Fonseca de Salamanca. Durante el
encuentro se analizaron distintos estudios sobre infecciones y
patologías cardiovasculares, además de la realización de talleres y
otras actividades.
Igualmente, en el marco de esta Jornada, la doctora Rosón, del
Servicio de Medicina Interna del Hospital de Bellvitge (Hospitalet),
presentó, como directora técnica del Registro Clínico Nacional sobre
Alcohol en pacientes ingresados en Servicios de Medicina Interna
(Estudio ASMI), los resultados del mismo, en el que se evaluaron la
prevalencia y las formas de registro médico de consumo de alcohol en
más de 1.000 pacientes ingresados en Servicios de Medicina Interna de
21 hospitales españoles.
En este informe, los profesionales pudieron comprobar que
aproximadamente el 8 por ciento de los pacientes que acudieron a
Medicina Interna presentaban un consumo alcohólico de riesgo, y cerca
de un 4 por ciento tenían dependencia del alcohol.
Por otra parte, en este mismo estudio se puede constatar que "al
realizar la historia clínica de ingreso, al 40 por ciento de los
pacientes no se le había interrogado acerca del consumo de alcohol. Y
en los casos en que se había registrado este dato, sólo se había
cuantificado el consumo de bebida alcohólica en un 18 por ciento de los
pacientes, lo que refleja el defectuoso método de detección por parte
del médico que les atiende", según la información facilitada por la
SEMI.
Francisco Javier Laso indicó que el médico de Atención Primaria
"interroga poco o mal a la hora de poner en relación un cuadro clínico
con el alcohol". Además, añadió que "se conoce poco porque muchas veces
el interrogatorio se hace sesgadamente".
CONSUMO DE RIESGO
El jefe del Servicio de Medicina Interna II del Hospital
Universitario de Salamanca y coordinador del Grupo de Trabajo sobre
Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna
explicó que hay distintos niveles para hombres y mujeres en cuanto al
consumo de alcohol que se puede considerar de "riesgo".
En este sentido, señaló que los varones se incluyen dentro de este
colectivo si beben diariamente 4 botellines de cerveza o vasos de vino,
o tan sólo con la ingesta de 2 bebidas destiladas cada jornada.
En el caso de las mujeres, Francisco Javier Laso explicó que las
cantidades se reducen a 2 botellines de cerveza o vasos de vino, o una
bebida destilada.