En términos generales, los resultados revelan que los adictos al uso de estas tres sustancias provocan una disminución de la mortabilidad espermática, alteraciones en la morfología y disminución de valores séricos hormonales, con mayor severidad en el grupo de adictos a las drogas.
Alvarado Zaldívar dio a conocer que el objetivo del estudio fue determinar las alteraciones hormonales y espermáticas que producen las sustancias como el tabaco, el alcohol y el uso de drogas, para lo cual, se estudiaron grupos de 18 personas: un grupo adicto al tabaco, otro al alcohol y otro más a drogas.
En el caso de tabaquismo y alcoholismo, los sujetos al estudio presentaron inhabilidad para eyacular, y los usuarios de drogas presentaron insuficiencia para eyacular y pérdida de la líbido.
“Muchas veces el hombre y la mujer atribuyen sus problemas sexuales a las dificultades maritales, problemas emocionales y estrés, dejando a un lado y sin importancia la conducta en el consumo de estas sustancias nocivas”, agregó.
Indicó que en el estudio del consumo de sustancias como factores de riesgo para la manifestación de otros problemas se define el abuso como el punto a partir del cual el uso de sustancias constituyen un riesgo significativo para la salud.
Además, dijo que las adicciones pueden estudiarse como trastornos en sí mismos o como factores de riesgo para la manifestación de problemas sociales o de salud.
Explicó que definir los niveles de consumo representa múltiples ventajas desde el punto de vista epidemiológico, sin embargo, señalar qué cantidad de sustancias tóxicas no causa problemas es muy complicado, debido a diferentes factores, entre ellos la susceptibilidad individual.
Añadió que el Departamento de Salud de Estados Unidos de América establece como consumo moderado, o sea aquel que generalmente no produce problemas para el usuario ni la sociedad, la ingestión de no más de una copa de vino o cerveza por día para la mayoría de las mujeres o personas de avanzada edad y dos copas o dos cervezas para la mayoría de los hombres.Se excluye de estos lineamientos a alcohólicos, menores de edad y mujeres embarazadas o que desean embarazarse, y en el caso de las drogas es común argumentar que cualquier uso es abuso, incluyendo tabacos e inhalantes.
La investigadora universitaria señaló que el uso de cualquier droga o sustancia tóxica tiene efectos indeseables sobre la salud y específicamente sobre la función sexual, pues se puede presentar el problema de impotencia, pérdida de la líbido, crecimiento de mama, inhabilidad para eyacular y disminución de la cuenta espermática.
Además, señaló que el consumo de alcohol en el adolescente puede retrasar el inicio de la maduración sexual y produce subfecundidad y las alteraciones más comunes en estos consumidores son: impotencia, atrofia testicular, infertilidad, disminución de la líbido, cambios morfológicos en los espermatozoides, incluyendo la ruptura de la cabeza espermática y daños en la cola del espermatozoide; disminición de niveles plasmáticos de la testoterona alterando la espermatogésis; además se ha observado que el alcohol puede aumentar la producción de moco en el semen, lo cual afecta la motilidad del espermatozoide y a su vez el proceso de fertilización.
Proyecta Facultad de Medicina formar nuevos profesionistas
La Facultad de Medicina de la Universidad Juárez, acreditada como una de las mejores del país, tiene como propósito crear sus propios recursos humanos, por lo que impartirá un diplomado en adicciones.
Para esta actividad académica cuenta con la coordinación del Centro de Atención Psicológica a la Mujer, y está dirigida a profesionales de la Psicología, Medicina Humana, Trabajo Social y Enfermería.
El objetivo es formar profesionistas en el área clínica de adicciones capaces de intervenir en actividades de diagnóstico, prevención y tratamiento, además de promover solución óptima de los problemas que dificulten el desarrollo sano del individuo dentro de su contexto social, familiar e individual, además de desarrollar investigación y realizar instrumentos de medición que permitan elegir el tratamiento adecuado.