SONIA BARRADO | LOGROÑO - Pero no siempre es posible tener constancia de esta realidad, pues
hay población oculta consumidora de cocaína que escapa a la observación
institucional, a pesar de la existencia de múltiples fuentes de
información sobre los consumos de cocaína y su impacto sobre la salud.
Y
es que normalmente, según fuentes sanitarias, transcurren como promedio
nueve años desde que las personas que se inician al consumo de cocaína
demandan por primera vez el tratamiento. Por tanto, la mayor parte de
los consumidores de cocaína permanecen ocultos a los sistemas de
información disponibles. Es por ello que la Sociedad Española de
Toxicomanías está realizando un estudio de consumidores ocultos de
cocaína en La Rioja, a raíz de la firma de un convenio suscrito para
tal fin con la Consejería riojana de Salud y por el que ésta aporta
17.334 euros para el desarrollo del proyecto.
El objetivo
principal de este estudio es profundizar en el conocimiento de la
realidad del consumo de drogas entre los jóvenes riojanos y conocer
también cuáles son sus necesidades para conseguir una prevención más
eficaz y mayor calidad en la asistencia de los problemas derivados de
su consumo.
Perfiles diferenciados
Dentro de la población
oculta de personas que consumen esa droga existen diferentes perfiles
claramente diferenciados, que irían desde los consumidores de cocaína
base o de policonsumidores que se inyectan cocaína (en su extremo más
marginal) hasta una población de consumidores con estilos de vida
normalizados.
Es por este motivo que, además del objetivo
principal que guía este proyecto, la Consejería persigue otros fines
específicos, como estimar el número de consumidores de cocaína
existentes en La Rioja, identificar los factores que dificultan el
acceso de estos consumidores al tratamiento, conocer el impacto de los
consumos de cocaína en la salud y la calidad de vida de los
consumidores, así como identificar las necesidades específicas que los
consumidores de cocaína presentan.
No es la única iniciativa
puesta en marcha por la Consejería de Salud de La Rioja con el ánimo de
intervenir sobre el consumo de la cocaína, una de las drogas ilegales
que más problemas está empezando a crear entre la población juvenil (es
la segunda más consumida en La Rioja, después del cannabis).
Programa escolar
En
este ámbito, Salud desarrolla el programa escolar de prevención del
consumo de cocaína para alumnos de Bachillerato y, entre otras
actuaciones, también ha editado en 2008 la Guía para padres «Habla con
ellos de la cocaína».
Esta publicación pretende informar a los
padres sobre las causas y consecuencias del uso y el abuso de la
cocaína y otras drogas estimulantes favorecer cambios de actitudes
entre los jóvenes riojanos. En concreto, la guía aborda el problema con
el que se topan muchos padres riojanos, que desconocen cómo ayudar y
orientar a sus hijos respecto al consumo de estas sustancias.
Asimismo,
dentro de sus actuaciones para luchar contra la cocaína y otras
sustancias ilegales, el Ejecutivo regional ofrece información a los
ciudadanos y a los afectados por el consumo de esta droga a través de
un número de teléfono confidencial y gratuito (900.71.41.10).