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Santiago de Torres: “La convivencia con las drogas ha generado una insensibilidad social frente al problema”
Fecha: 29.11.2006 Fuente: FAD

Desde su punto de vista, esta convivencia con los consumos de drogas provoca que “por conocido” sea un problema que se percibe por la sociedad como resuelto. “El consumidor se encuentra integrado socialmente por lo que cree no necesitar atención dado que se encuentra socialmente aceptado”. Se ha pasado de la marginación que provocaba el consumo de heroína a los “consumos integrados”, existentes en la actualidad, que han hecho desaparecer el riesgo de marginación. “El aumento de la oferta de servicios sociales y sanitarios ha provocado una disminución de la respuesta de la familia ante el problema, institución que al principio asumía casi en solitario la atención al toxicómano”. Se ha producido un cambio fundamental del “consumo continuado al consumo intermitente, que no genera la marginación social que provocaba antes”.

(Madrid, 28 de noviembre de 2006).- El médico y ex director general del Plan Nacional sobre Drogas, Santiago de Torres Sanahuja, ha ofrecido en presencia de SM la Reina, la conferencia inaugural del IV Congreso Anual FAD “Sociedad, familia y drogas” que se celebra desde hoy y hasta el próximo 30 de noviembre en Madrid.

 

En su intervención, titulada ‘De la heroína como amenaza al consumo integrador’, Santiago de Torres ha asegurado que ahora “el consumidor de drogas se encuentra integrado en la sociedad por lo que cree no necesitar atención dado que se siente aceptado socialmente. Además, el cambio de consumo continuado al consumo intermitente no genera los procesos de marginación social que provocaba antes”.

 

De Torres ha resaltado, también, que se ha pasado de la marginación que provocaba el consumo de heroína a los “consumos integrados”, existentes en la actualidad, que han hecho desaparecer el riesgo de marginación. Este hecho lleva, según De Torres, a que “la gente piense que el problema del consumo de drogas ha desaparecido o al menos se ha reducido de forma significativa”. Sin embargo, según los datos expuestos por el experto, el consumo de cannabis y cocaína se ha incrementado notablemente en los últimos años. En 1995, la prevalencia del consumo de cannabis en España era de un 7,5% en población de 15 a 64 años y en 2003 el porcentaje se ha elevado al 11,3%. En cuanto a cocaína, en 1995 existía una prevalencia de consumo de 1,8% en la población española de 15 a 64 años. En 2003, el porcentaje se sitúa en el 2,7%.

 

En su opinión este importante incremento se ha producido por la “disminución del riesgo percibido ante el consumo esporádico de ambas sustancias”, aunque reconoce que los jóvenes españoles conocen y asumen efectos como “pérdida de memoria, dificultad para estudiar, tristeza, ganas de no hacer nada” en el caso de consumo de cannabis, e “insomnio, depresión y problemas económicos” en el caso del consumo de cocaína.

 

Respecto a las medidas de prevención, el médico ha señalado que “al ofrecer soluciones de normalización se crea una disminución de la percepción del riesgo”, prueba de ello es que “las drogas ya no aparecen en los primeros puestos de las encuestas de preocupación social”. También ha destacado que el descenso del consumo de heroína, droga identificada por la sociedad como la que mayor adicción genera, ha contribuido a  esta disminución de la apreciación del riesgo. Por otra parte, ha resaltado que “el aumento de la oferta de servicios sociales y sanitarios ha provocado una disminución de la respuesta de la familia ante el problema, institución que al principio asumía casi en solitario la atención al toxicómano”.

 

En este punto, De Torres se pregunta si la existencia de consumidores adultos, de años de duración en el consumo, provoca la banalización del riesgo en los jóvenes, y si “la convivencia social con el fenómeno de las drogas, de más 25 años en nuestro país, haya generado una insensibilidad social frente a un problema, que por conocido se entiende resuelto”. Todas estas cuestiones han llevado al experto a proponer una “reflexión

profunda de cómo enfocar el fenómeno de las drogas, cuestionarnos algunas de las prácticas habituales y aceptar que entre conocer el problema y conocer la solución queda todavía un buen trecho.”

 

El IV Congreso Anual FAD “Sociedad, familia y drogas” ha sido organizado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), en colaboración con el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, y el apoyo de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, ONCE, Obra Social de Caja Madrid, entre otras instituciones. Su objetivo es exponer y debatir la situación actual de los consumos de drogas en nuestro país, analizar los cambios que se han producido en los últimos años, y el impacto y el reflejo de todo ello en las familias y en el conjunto de la sociedad. En él participan más de 900 profesionales del ámbito social y educativo.

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